La obesidad representa un problema de salud pública muy importante a nivel mundial y que tiene un aumento imparable en las últimas décadas. Existen dos causas principales: la aparición de alimentos precocinados con alto contenido en grasas y azúcares; y por la revolución tecnológica que nos ha llevado al sedentarismo.
Estas dos circunstancias han generado un desequilibrio energético positivo, en el que se ingieren más calorías de las que se consumen. En base a este hecho se han desarrollado diferentes propuestas de intervención que no solo se basan en la dieta y la cirugía, si no que destacan el papel protagonista e indispensable del ejercicio físico para el tratamiento de la obesidad.
“El ejercicio es tu medicina”
La actividad física es el pilar fundamental en la prevención de enfermedades crónicas. Pero cuando esta prevención falla, el ejercicio físico sigue siendo de suma importancia en el tratamiento de estas enfermedades. Existen multitud de estudios que concluyen que el ejercicio es beneficioso para la prevención de la diabetes mellitus tipo 2, la hipertensión arterial, dislipemias, síndrome de apnea hipopnea, enfermedades cardíacas, artrosis, osteoporosis, fibromialgia, cáncer, depresión…
A pesar de las múltiples evidencias de su beneficio en la salud, no se han desarrollado programas de educación física y del deporte los suficientemente eficientes que produzcan una reducción en los índices se sobrepeso y obesidad. Guía de preparación para la Cirugía Bariátrica https://www.instagram.com/drpauarago/
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